¿Dean Huijsen es el próximo Varane… o solo una ilusión blanca?
Analizamos sin rodeos si el central de 20 años puede encajar en la exigencia del Real Madrid o será otra promesa que se diluye.
El pasado 8 de junio, el Real Madrid presentó a Dean Huijsen, central español de tan solo 20 años proveniente del Bournemouth, en un acto que Florentino Pérez lo calificó de “estelar”. Con esa etiqueta, la directiva pretende transmitir confianza, pero en un club que exige resultados inmediatos, hay que preguntarse: ¿es Huijsen un recambio fiable para el eje defensivo o un “tronco” que tarda en generar retorno?
Primero, lo positivo. Huijsen viene con experiencia en Championship y Premier League inglesa: no es un niño de cantera. Su físico imponente y capacidad para anticipar entradas le han dado reputación como prospecto sólido. En una defensa que perdió más seguridad tras la salida de Ramos, su perfil añade centímetros y presencia aérea.
Pero aquí empieza el primer filo: ¿puede adaptarse al contexto madridista? El Madrid exige técnica al corte, salida limpia desde atrás, rapidez de lecturas tácticas… y Huijsen, con solo un par de temporadas en Inglaterra, todavía no ha mostrado ese perfil excelso que demanda Zidane (o Xabi Alonso). La transición del fútbol inglés al español no es trivial: mejora sustancial, ritmo diferente y presión mediática brutal.
Luego está el riesgo institucional. En los últimos diez años, el club ha cometido encajes fallidos con centrales jóvenes (¿recuendan a Militao antes de afianzarse?), pero el margen con Huijsen es mínimo si llega el otoño y no convence. Florentino ya ha repetido que está convencido de su apuesta, pero la exigencia blanca no perdona rendimientos a medias.
Además, la presencia de mineros negros en la plantilla —Rüdiger, Militao, Alaba— pone presión sobre Huijsen. No va a tener hueco por inercia: si no gambetea entrenos y pretemporadas, no veremos minutos. Y la rotación cero no es opción en un equipo que aspira a todo.
Sin olvidar cambios en la estructura: Alonso está modernizando el modelo de juego, con defensa que arranca ataques y capacidad de línea de 3 hacia dentro. ¿Huijsen encajará en ese sistema de pressing alto y salida limpia? Aún no lo sabemos, pero sería ingenuo asumir que sí sin verlo competir.
De fondo, una duda más: ¿es un refuerzo para el futuro o para el proyecto inmediato? El Madrid requiere caras nuevas, pero no siempre el debutante estrella la cancha. Aquí, la balanza está floja: el club parece estar dando confianza, pero sin esa pausa de adaptación y sin garantizar un mínimo de 25 partidos que digan “este es el elegido”.
Con todos esos factores, la gran pregunta queda abierta: ¿El Madrid ganó una joya o soltó millones por alguien que será otro central más de salón? Y ahí entramos nosotros: ¿vale la pena la apuesta?
Para ti, lector: ¿crees que Huijsen hará historia en el Bernabéu o será otro De la Red que se queda en promesa?